miércoles, 7 de julio de 2010

Fisica simple: "Polos opuestos se atraen", o no?


Por décadas hemos venido escuchando y aceptando como una ley de la vida, algo que solo debe tomarse como un principio de la Física: “Polos opuestos se atraen, polos iguales, se repelen”

Que me levante la mano aquel que en su infancia o días de escuela no realizó el maravilloso “experimento” de poner dos imanes y comprobar por medio de la “experimentación” que ese principio es correcto.

Pero afuera de la física, será aplicable esto a nuestra vida sentimental? Algunos estarán en este momento haciendo el movimiento con su cabeza de arriba hacia abajo diciendo: “Si, si se aplica” otros, entre ellos mi persona, estamos totalmente convencidos que, afuera de la física, este principio no aplica a nada.

Algunos podrán decir, bueno, cuando una chica es una “chica buena”, es atraída por “chicos malos”, esto prueba que el principio aplica a la vida sentimental, pero nada mas lejos de la realidad, ese tipo de atracción hacia personas que son de alguna manera diferente a lo que nosotros somos, es únicamente una forma de expresar que deseamos ser como ellos, es decir, que adentro somos iguales a ellos o ellas, pero no hemos podido sacar esa personalidad.

También existe la parte de la atracción física animal, que más que una decisión, es más un instinto propio de los animales, que hemos heredado por naturaleza. Pero me gustaría hablar un poco de lo que en mi humilde opinión, contradice y deja sin validez el principio de la física de los polos opuestos.

Cuando se trata de las relaciones sentimentales, relaciones de pareja, relaciones a largo plazo, de convivencia en un lugar común, lo de los polos y “paja” es lo mismo, a continuación les explico cual es la razón de mi afirmación.

Me imagino que todos hemos escuchado aquella frase divertida que reza: “la mujer se casa con el hombre esperando que cambia (en comportamiento) y que creen? Nunca cambia. El Hombre se casa con la mujer esperando que NO cambie (físicamente) y que creen? Siempre cambia”

He allí una gran verdad, cuando decidimos vivir en parejas, lo primerito que tratamos de hacer, es hacer a nuestra pareja a nuestra manera, “es que el es muy desordenado, no baja la tapa del inodoro, no tapa la pasta dental, nunca recoge su ropa, deja la toalla en la cama” etc., etc., etc.

Estoy acaso diciendo que todos estos comportamientos son buenos? O son malos? Realmente, no se ni tampoco es el punto de mi discusión, mi propósito con este ejemplo no es señalar, si no ilustrar que siempre tenemos algo que reprochar de nuestra pareja y que nos gustaría que “cambiara”, por que? “porque eso es lo correcto, asi se deben hacer la cosas” MENTIRA!! Es porque YO lo hago asi, y me gustaría que EL (o ella) lo hiciera igualito que YO! Es decir, me gustaría que ese “polo opuesto” fuera de mi mismo “polo”, que actuara igual que yo.

Siempre estamos tratando de cambiar a nuestra pareja, igual los hombres, siempre tienen algo que objetar de sus parejas, si no les gusta el futbol, pues tiene que gustarles y hasta la camiseta les compramos, y vámonos para el estadio que hoy hay partido. O al revés, vámonos para el ballet que hoy hay presentación. Como a mi me gusta la opera, a ti te tiene que gustar.

Ahora, analicémoslo desde otro punto de vista: “No seria hermoso que a mi pareja le gustara y apasionara el futbol tanto como a mi? No seria grandioso que así como a mi me apasiona leer libros de poesía, mi pareja se sentara conmigo a leerlos juntos al calor de la chimenea con una copa d vino, porque a ambos nos gusta el vino?”

No seria hermoso, que el esposo le diga a la esposa: “amor, alístate porque hoy quiero que disfrutemos la obra de teatro que tanto hemos esperado, hoy juega la selección la final el mundial de FIFA, pero no importa, me gusta mas el teatro” Hermoso no!

Entonces, donde queda el principio de “polos opuestos”? en la basura seguramente. Las parejas son más felices si comparten los mismos gustos, las mismas aficiones, y lo logran disfrutar juntos. Benditos son aquellos que logran encontrar su “media naranja”, analicemos esa frase: “media naranja” una mitad es 95% igual a la otra mitad” pues no es mitad naranja y mitad aguacate, la idea es “su media naranja”

Por favor amables lectores, no vayan a malinterpretar mis palabras, por supuesto que se que no todo puede ser igual, pues la relación debe complementarse, pero en mi humilde opinión, todos nosotros estamos buscando nuestro otro yo, alguien que le guste y le apasione lo mismo y que no tengamos que sacrificar nuestras pasiones, porque nuestro otro polo la aborrece.

La pareja que comparte las mismas aficiones, mismos gustos, mismas pasiones, y lo logra hacer juntos, esa pareja estará junta para siempre, como dos imanes que desafiando las leyes de la física, aun siendo de polos iguales, se quedarán fusionados eternamente.